Ríos
Las corrientes de los ríos suelen asociarse con ideas de bienestar y prosperidad , con paisajes bucólicos, a veces con temidas inundaciones, con dolorosas pérdidas, con temporales, o con calmas.
Pero también podemos pensarlas como corrientes vitales que nos aproximan o nos alejan del entorno. De situaciones deseadas o de pesadillas temidas. De personas afines a nosotros y de quienes no los son.
Y aquí me detengo. ¿Cómo estar con el otro? ?Desde dónde? ?Desde mi corriente? ¿Desde la corriente ajena?
Sin perder el propio caudal ni la característica de nuestra agua se puede dar o recibir la que hace la diferencia, provoca remolinos, o crea remansos, limpia o fertiliza, expande o contiene, creando en nuestras emociones una necesaria isla o un ansiado mar.
Fluir y dejar fluir. Entregar y aceptar. Dificultosa pero adecuada ecuación para convivir con equilibrio. ¡Menuda tarea!
La meta lo vale.
Diana Alvarez